¡Al fin otra crítica de un libro! Esta vez le toca el turno a Pórtico, de Frederick Pohl, escrita en 1976, y que tiene los honores de haber ganado Premio Hugo de 1978 por mejor novela, el Premio Nébula 1977 por mejor novela y el Premio John W. Campbell Memorial Award de 1978. Bastante impresionante, si consideramos que son los tres principales premios del mundo de la ciencia ficción.
Pero bueno, pasemos al libro. Pórtico es un asteroide hueco, construído por la raza Heechee, de la que poco o casi nada se sabe, y que fue construído a manera de puerto espacial. Cuando Pórtico es descubierto, también se descubren casi mil naves Heechee abandonadas, de las cuales bastantes funcionan todavía, pero que hasta ese momento nadie sabe manejar. Por medio de prueba y error, poco a poco se va descubriendo como activar los controles de las naves, y van siendo usadas, pero, y este es un gran pero, al usar las naves, estas llevaban a sus pasajeros a un destino desconocido: algunas veces a planetas inservibles, otros habitables, muchas veces hacia la muerte, y algunas veces hacia lugares con artefactos Heechee, por los que la Corporación Pórtico, que administraba todos los bienes y procesos del asteroide, pagaba altas sumas monetarias.
No te preocupes, no te he contado nada aún que arruine el libro. Después de este viaje del que, como se dijo antes, no se conocía el destino ni la duración, la nave regresaba automáticamente a su origen, o sea, a Pórtico. Las naves venían en tres tamaños: Uno, Tres y Cinco, que hacían referencia al número de personas que podían entrar en las naves. Algunas de ellas estaban acorazadas, y eran las más peligrosas de tripular.
El protagonista de la historia se llama Robinette (Bob) Broadhead. Este es un minero que gana la lotería y con eso se compra un boleto de ida a Pórtico, para volverse prospector (el nombre que recibían los tripulantes de las naves Heechee). Bob Broadhead participa en 3 misiones, de las cuales no hablaré, pues son parte importante de la historia, excepto para decir que en la tercera pasan cosas que lo afectan profundamente en todos los aspectos. El libro alterna entre las sesiones de Bob Broadhead con un sistema de inteligencia artificial que hace las tareas de un psicólogo, llamado Sigfrid, y entre las memorias de Bob Broadhead de todo lo que pasó.
El libro es interesante: el manejo del autor entre las sesiones de Bob con Sigfrid, y los flashbacks es magistral, y la relación entre estos genera un sentimiento de tensión que se transmite al lector. Por otro lado tenemos las memorias de Bob, en las que se describen con detalle los pormenores de los viajes que este hace en las naves de Pórtico. Y entre estas dos historias poco a poco se van entretejiendo cada vez más y más hasta que forman una sola, y al final tenemos una conclusión satisfactoria para la historia, un libro que a fin de cuentas resulta fácil de leer y bastante entretenido, con personajes complejos pero bien desarrollados, como en el caso del mismo Bob.
En resumen, lee Pórtico; es un buen libro de ciencia ficción, de lectura obligada para todos los fans del género.
Curioso que nombres la presencia de “flasbacks” y “análisis psicológico” en este libro.
Hace 13 años leí un libro del mismo Pohl acerca de un astronauta el cual pasa por un proceso bastante traumático para poder paticipar en un proyecto de digamos “amartizaje” y de supervivencia en este planeta, el titulo del libro en su idioma original es “Man Plus”.
Recuerdo vividamente las difíciles sesiones psicologicas bajo las que estuvo este astronauta para ayudarlo a través de todo este proceso y como su psique, debido a los experimentos, fue transformándose paulatinamente hasta casi crear un especie de complejo de “Frankenstein” en el.
En realidad es un excelente libro y me asombra la similitud con ciertos temas ya nombrados por ti. Se diría que Pohl tiene un gran interés en el analisis y funcionamiento de la psique humana, sus límites, fortalezas y en los factores externos que pueden llegar a transformarla o dejar un marca indeleble; al igual que por transportar a sus personajes a escenarios y situaciones desconocidas y mostrarnos las consecuencias, buenas o malas que esto les traerá.
Me has despertado el interés en leer de nueva cuenta aquel primer libro y visitar “Pórtico”.
¡Gracias por la recomendación colega!.
Suena igual de interesante el libro que mencionas…habría que darle una leida, porque definitivamente Pohl está interesado en esos temas por lo que dices…
Hace una semana leí esta preciosa novela. He de reconocer que es de las que más me ha enganchado y he disfrutado. Recomiendo que la leais, ademas cuando la termineis de leer, volver a leer el primer capitulo que es como si siguiera la novela y alli es donde verdaderamente acaba. Recomendado!!